Las “sodas prebióticas” de Poppi se vendieron como aliadas del intestino. Hoy, tras una demanda colectiva por publicidad engañosa, la marca aceptó un acuerdo económico que beneficia a quienes compraron sus bebidas en Estados Unidos durante los últimos años. No se trata de una admisión de culpa, sino de un arreglo que, si el tribunal lo aprueba de forma definitiva, permitirá a los consumidores solicitar un reembolso.
Pueden reclamar quienes hayan comprado cualquier bebida Poppi entre el 23 de enero de 2020 y el 18 de julio de 2025. El monto a recibir depende de si guardaste recibos o no. Con comprobantes, la compensación se calcula por unidad o por paquete; sin recibos, el reembolso tiene un tope por hogar. El dinero se prorratea entre todas las solicitudes válidas.
La fecha límite para enviar la reclamación es el 26 de septiembre de 2025. Además, está prevista una audiencia de aprobación final para el 20 de noviembre de 2025. Si el juez lo autoriza, los pagos suelen procesarse en un plazo aproximado de 90 días después de esa audiencia. Todo el proceso puede hacerse en línea y no requiere contratar abogados. Llena tu reclamo aquí.
Más allá del reembolso, este caso deja una lección de consumo: los claims de “salud intestinal” en bebidas azucaradas o endulzadas no sustituyen a una dieta equilibrada, suficiente en fibra real, proteína de calidad y hábitos que cuidan la microbiota. En la revista hemos cubierto por qué el músculo y la proteína importan más para tu metabolismo que cualquier eslogan de moda, y cómo leer una etiqueta para que el marketing no decida por ti.
Fuente: oppisettlement.com
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