
Un estudio reciente realizado en Corea del Sur ha revelado que el consumo de café negro sin azúcar ni crema puede mejorar significativamente la sensibilidad a la insulina en mujeres, lo que podría tener implicaciones importantes para la prevención y manejo de la diabetes tipo 2.
El estudio en detalle
La investigación, publicada en la revista Nutrients, analizó datos de más de 7,400 adultos coreanos, enfocándose en la relación entre el consumo de café y los marcadores de metabolismo de la glucosa. Los resultados mostraron que las mujeres que consumían dos o más tazas de café negro al día presentaban una menor resistencia a la insulina y niveles más bajos de insulina en ayunas en comparación con aquellas que no consumían café o lo hacían con aditivos como azúcar o crema.
¿Por qué el café negro?
El café negro es rico en compuestos bioactivos como los polifenoles, especialmente el ácido clorogénico, que poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Estos compuestos pueden mejorar la función de la insulina y ayudar en el control de los niveles de azúcar en sangre.
Es importante destacar que los beneficios observados en el estudio se asociaron específicamente con el consumo de café negro sin aditivos. El café con azúcar o crema no mostró los mismos efectos positivos, lo que sugiere que los aditivos pueden contrarrestar los beneficios del café.
Implicaciones para la dieta cetogénica
Para quienes siguen una dieta cetogénica, el café negro puede ser una excelente opción de bebida, ya que no contiene carbohidratos ni azúcares añadidos. Además, sus posibles beneficios en la mejora de la sensibilidad a la insulina lo convierten en una elección inteligente para apoyar la salud metabólica.
Recomendaciones finales
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Opta por café negro: Evita añadir azúcar o crema para maximizar los beneficios.
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Modera el consumo: Dos tazas al día parecen ser suficientes según el estudio.
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Consulta con un profesional de la salud: Antes de hacer cambios significativos en tu dieta, especialmente si tienes condiciones de salud preexistentes.
Incorporar café negro en tu rutina diaria podría ser una estrategia sencilla y efectiva para mejorar la sensibilidad a la insulina y apoyar tu salud metabólica, especialmente si eres mujer y sigues una dieta cetogénica.
FUENTE: Nutrients
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